Silva
el viento, enmudece la noche y
la
princesa rota pasea por la calle.
La
fragilidad camina en pelotas
entre
charcos de sucia escarcha.
Con
la sonrisa congelada
enarbola
su estandarte y
se
abre de piernas escondiendo su alma.
Heredera
del reino de la esquina
donde
el invierno congeló su mirada…
¿por qué sigues cantando esa triste canción
que
araña el recuerdo del alba?
Hoy
no conciliaba el sueño
y
quise escribir unos versos.
Unos
versos para ti, puta,
princesa
rota de la esquina olvidada.
1 comentario:
Me encantó, bonito eh!!,m qué arte,llevo meses sin poner nada en mi blog, la flogera me puede, jeje, besos amiga, guapaa.
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